El jugador del Leganés Alberto Bueno evidenció «las ganas» que hay en el equipo por «quedarse en Primera» pese la dolorosa derrota contra el Sporting de Gijón (0-2) en la última jornada. El atacante madrileño, cedido por el Oporto, espera recuperar su mejor fútbol al sur de Madrid, donde ya triunfó hace dos años en el Rayo Vallecano. En Butarque ha sido llegar y besar el santo. «Rápido me he puesto al día. Estoy muy contento por esta oportunidad y tengo muchas ganas de devolver al Lega la confianza que ha depositado en mí».
Con el ’10’ a la espalda y recién ‘aterrizado’ en Madrid, Bueno visitó el pasado lunes los estudios de Antena Cemu Radio para analizar el estado anímico del equipo y la situación antes de afrontar la visita al Camp Nou. «Tenemos que mirar hacia delante y pensar en el Barcelona. Creo que podemos sacar cosas positivas allí más allá de los tres puntos», dijo el ex del Rayo, que todavía lamenta el cabezazo del pasado domingo en lo que fue la ocasión más clara del Lega ante el Sporting. «Es una pena que mi cabezazo no hubiera acabado en gol. La crucé demasiado», recordó.
«Hago autocrítica en el sentido de que tenemos que saber reponernos cuando encajamos un gol», añadió Bueno, que está «con muchas ganas de devolver al Leganés» toda la confianza depositada en él. «Estoy muy feliz desde que llegué. Además, comparo este vestuario con el que tuve en el Rayo. Es muy cercano, humilde y trabajador. El Leganés me transmitió confianza desde el principio. La forma de jugar y la mentalidad que tiene el equipo me daban y me dan buenas vibraciones», comentó.
Preguntado por su adaptación personal, Bueno reconoció que no esperaba tener tantos minutos nada más llegar (90′ ante el Atleti y 79′ frente al Sporting). «No me esperaba ser tan protagonista al llegar. La verdad es que me encuentro muy a gusto con Asier y en el vestuario. En cuanto llegué me puso al día rápido. Me ha pedido que intente jugar en zonas donde soy provechoso para el equipo, que esté cerca del balón, que ayude defensiva y ofensivamente. Al final no dejo de haber vuelto a jugar tras un tiempo sin muchos minutos», aseguró.
«No quería estar en un sitio en el que no estaba a gusto o no tenía feeling»
Y es que después de su etapa en el Granada, Alberto tenía claro que debía salir. «En Granada jugué seis partidos seguidos, me encontraba bien, pero el cambio fue radical», dijo Bueno en relación a la salida de Jémez y la llegada de Lucas Alcaraz, el nuevo entrenador. «Jémez tuvo interés en mí aunque en el Oporto quería quedarse conmigo, pero yo necesitaba tener continuidad. Así que por eso decidí irme al Granada el verano pasado», relató.
«Yo no quiero estar en un sitio en el que no esté a gusto o no tenga ‘feeling’. Allí no lo tenía. Quería que mi salida del Granada se hiciera lo antes posible para ir a algún sitio donde me quisieran. Allí no tenía ese sentimiento de levantarme por la mañana y sentirme futbolista. Leganés me transmitió confianza y a pesar de que no es un equipo que gane partido tras partido, me dio buenas vibraciones, las mismas que me sigue dando ahora», explicó.
«Tener el objetivo claro es un punto a favor y aquí en Leganés lo tenemos marcado a fuego»
Además, Bueno admitió que «en el día a día también es un punto a favor» para su «familia». «A nivel humano me he encontrado un grupo sensacional. gente muy cercana y muy trabajadora. En Leganés hay muchas ganas de quedarse en Primera. El objetivo es claro, está marcado a fuego. Todo el mundo sabe lo que hay que conseguir y eso es un punto a favor respecto a otros equipos que no se esperan o esperaban estar aquí», añadió.
Por último, Alberto Bueno también tuvo tiempo para repasar su etapa en el Oporto, donde coincidió con otros cuatro jugadores españoles. «Coincidí con Casillas y desde el primer momento estrechamos lazos. Ya le conocía de la etapa del Real Madrid». Pero además Marcano, José Ángel y Cristian Tello. «Hicimos muchas migas, coincidimos, salimos, mujeres e hijos tuvimos un gran ambiente», comentó. «Creo que tuve una merecida oportunidad en un equipo grande de Europa», sentenció el ’10’ del Lega, que lamentó haber tenido que operarse poco tiempo después.