El Leganés inició la temporada con una victoria ante su afición. El penalti fallado por Manu García, que adivinó perfectamente Cuéllar, marcó un partido que se resolvió con un solitario gol del brasileño Gabriel. Los locales fueron más compactos y supieron aguantar las pocas envestidas de los babazorros.

C.D. LEGANÉS 1-0 DEPORTIVO ALAVÉS

El Leganés iniciaba la temporada 2017/18 ante el Alavés, el mismo rival con el que finalizó la temporada anterior logrando una permanencia histórica. Casualidad o no, los pepineros se enfrentaban de nuevo ante el glorioso y con el objetivo de brindar una victoria al respetable pepinero. Garitano apostó por una base importante de la campaña anterior repitiendo hasta en siete jugadores. En cuanto a las novedades, la competencia en la portería cayó del lado de Cuéllar, al que también acompañaron caras nuevas como las de Zaldua, Eraso y Muñoz apuntalando un equipo con evidente base veterana.

El partido de apertura de LaLiga empezó con demasiados tintes veraniegos. A pesar de ello el equipo local inició con un punto mayor de intensidad que el equipo babazorro. Así llegaría la primera ocasión pepinera tras un cambio de orientación de Omar Ramos. El balón caía en poder del argentino Szymanowski que puso el esférico en el corazón del área y a punto estuvo el 9 pepinero de desviar lo suficiente para llevar el primero al luminoso. Pronto respondería el Alavés. Un error en la salida de balón de los blanquiazules puso en predisposición al cuadro vasco de generar la que iba a ser la primera ocasión de los visitantes tras un remate de Sobrino que no iba a tener consecuencias para el meta local. Pero sólo unos minutos después, un derribo de Rico sobre Burgui iba a provocar la incertidumbre en la parroquia blanquiazul. El trencilla señaló lo que todo el mundo vio y todas las miradas las acaparaba la figura del debutante Cuéllar. Dicho y hecho. Ocurrió lo que pasó por la cabeza de cada uno de los aficionados del Leganés. El guardameta extremeño lograba blocar la pena máximo. Alivio en Butarque. Momento de una nueva reacción de los de Asier Garitano que tras varias intentonas iba a dibujar lo que a la postre sería el primer gol de la tarde tras una falta de Wakaso sobre Gabriel.  Guerrero lanzó la falta, el esférico pegó en Sobrino y el rechace fue aprovechado por el brasileño Gabriel llevando la algarabía a la grada. Fue lo más reseñable de una primera parte que iba haciendo mella en unos equipos que acaban de comenzar la competición. Pocas ocasiones más hubo hasta que el colegiado decretó el descanso del partido.

Volvía a comenzar mejor el conjunto local con mayor intención en el inicio de los segundos 45 minutos. Los blanquiazules generaban intentonas para sentenciar el partido pero unos veces el desatino y otras la retaguardia vasca desechaban las ocasiones. Zubeldía daba entrada a Tomás Pina y Romero y eso espoleó al glorioso que lo intentó mediante las internadas de Burgui y Romero. Las pocas ocasiones generadas por los vascos no se materializaron y el partido fue entrando en una dinámica de control por parte de los pepineros que supieron gestionar la renta obtenida en la primera parte. La segunda parte no ofreció mucho más, quedando especialmente en la retina el sacrificio de los locales por mantener una tensión y una victoria que ayudarán a fortalecer la idea del entrenador.

El Leganés disputará su próximo partido en Barcelona ante el RCD Espanyol. Semana desahogada con tres puntos que dejarán trabajar con aires más optimistas.

FICHA TÉCNICA | C.D. LEGANÉS 1-1 DEPORTIVO ALAVÉS

C.D. LEGANÉS: Cuéllar; Zaldua (Bustinza, min. 81), Muñoz, Ezequiel, Rico; Rubén Pérez, Eraso (El Zhar, min. 69), Omar (Erik Morán, min. 65), Szymanowski, Gabriel y Guerrero.

DEPORTIVO ALAVÉS: Pacheco; Vigaray, Alexis, Rodrigo Ely, Pedraza (Héctor, min. 75); Manu García, Wakaso (Pina, min. 61), Ibai, Burgui, Sobrino (Romero, min. 61) y Santos.

GOLES: 1-0 (23′) Gabriel;

ÁRBITRO: Munuera Montero (Colegio andaluz). Amonestó a Wakaso.

INCIDENCIAS: Estadio Municipal Butarque. 9.231 espectadores. Se guardó un minuto de silencio motivado por el atentado registrado en Barcelona.