Cuando todo apuntaba que el jugador madrileño de Osasuna se marcharía al Fuenlabrada, el Leganés ha dado la vuelta a la negociación para hacerse con el centrocampista que firmará para las próximas cinco temporadas. El traspaso se ha fijado en tres millones de euros y el conjunto navarro se ha reservado un 15% de un futuro traspaso. Es el segundo jugador de Osasuna que acaba esta temporada en el conjunto pepinero tras Róber Ibáñez.

Luis Perea Hernández (23/08/1997; Alcalá de Henares) ya pisó el césped de Butarque antes de hacerlo con la camiseta del Lega. Fue en el primer partido de la pasada campaña en el que saltó al terreno de juego en el minuto 81. Es un futbolista de 1’92 metros con un gran despliegue físico que actúa como mediocentro, pero que también lo puede hacer de defensa central. El jugador se formó en las categorías inferiores del Alcalá, marchándose al Atlético de Madrid en infantiles para retornar al equipo complutense como cadete. De nuevo volvió a hacer las maletas hacia la capital firmando por el Rayo Vallecano también en categoría cadete. El destino lo ligó nuevamente al Atlético donde jugaría los tres años de juvenil.

Tras no continuar en el filial rojiblanco pondría rumbo a Pamplona para jugar en Osasuna, pero para el Promesas. Tras dos años forjándose como futbolista profesional y ganarse en el primero de ellos la oportunidad de debutar en Primera División frente el Alavés, Jagoba Arrasate confió en él para devolver al equipo dos temporadas atrás a LaLiga. La pasada campaña no tuvo tanta fortuna y terminó cedido en el Alcorcón, donde disputó 18 partidos y anotó dos goles.